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Pepe Bienvenida / La suerte suprema

viernes, 13 de noviembre de 2015

Cristiano-Mourinho, un matrimonio de conveniencia... para los Tattaglia / por Juan Manuel Rodríguez


 
"...Dice Relaño que le comenta Roncero que Abramovich y Nasser Al Khelaifi tienen "en sus oraciones" a Cristiano. La Madre Teresa de Calcuta decía que "el fruto de la oración es la fe y el fruto de la fe es el amor", pero el fin último de la oración que los Tattaglia rezan por escrito y aplican luego a los dueños del Chelsea y del PSG no es, por supuesto, el amor sino todo lo contrario, es el odio..."

Cristiano-Mourinho, un matrimonio de conveniencia... para los Tattaglia

Los Tattaglia se han puesto manos a la obra y han colocado de nuevo en el punto de mira a Cristiano, que fue un objetivo permanente nada más llegar a España (ojo a su entorno, una inversión suicida por un jugador por muy bueno que éste sea, cuidado con las salidas nocturnas...), pero que vieron aplazada momentáneamente su cacería en vista de que sus quejas quedaron literalmente enterradas bajo toneladas y toneladas de goles. Luego Cristiano, a quien nunca han acabado de tragar, fue utilizado sin piedad contra Mourinho, que era el mal superior, cuando todos los portugueses habían sido tildados despreciativamente de "clan" hasta hacía poco tiempo, casi de banda mafiosa. Cristiano se dejó utilizar y, como es cierto que el futbolista se muestra equidistante y se resiste a hacerle un guiño definitivo a la afición, ahora, en pleno mes de noviembre, se han puesto otra vez manos a la obra para sacarle de aquí con destino... ¿a dónde?... Pues a donde sea: PSG, Chelsea, lo mismo da...

Dice Relaño que le comenta Roncero que Abramovich y Nasser Al Khelaifi tienen "en sus oraciones" a Cristiano. La Madre Teresa de Calcuta decía que "el fruto de la oración es la fe y el fruto de la fe es el amor", pero el fin último de la oración que los Tattaglia rezan por escrito y aplican luego a los dueños del Chelsea y del PSG no es, por supuesto, el amor sino todo lo contrario, es el odio. Por supuesto que es perfectamente posible que los propietarios de dos de los clubes de fútbol más ricos del mundo quieran tener a uno de los cinco mejores goleadores de todos los tiempos, cómo no; pero, ¿para qué querría irse Cristiano del mejor club deportivo de la historia? ¿Para qué querría marcharse Cristiano del Real Madrid, que le ayudó a crecer como futbolista y sin el cual no habría conquistado títulos y recibido loas?... Sencillo: Cristiano quiere huir de Rafa Benítez, del mismo modo que antes quiso hacerlo de Mourinho.

Están tan desesperados los Tattaglia por hacerle daño a Benítez, o sea al Real Madrid, o sea a Florentino Pérez, que están incluso dispuestos a casarlo con su archienemigo Mourinho, del que pretendía huir hace poco: "Una difícil (pero posible) cohabitación". No hace tanto tiempo que Roncero, que hoy oficia de alcahueta entre los dos portugueses, firmaba un artículo titulado así: "Si Mourinho se fuese a París, Cristiano se quedaría en Madrid". Ahora que Cristiano no es el mejor Cristiano, ahora que el Real Madrid viene de perder en Sevilla y se abre esa suculenta perspectiva de una hecatombe ante el Barça, estos sacerdotes que ofician en nombre de la ética y de la deontología periodística están incluso dispuestos a casar de nuevo a Cristiano con Mourinho, un matrimonio de conveniencia... para ellos.

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